lunes, 5 de septiembre de 2016

SOGUETTO — ¡EN RAMPA DE LANZAMIENTO!

El vigoroso trazo es demasiado para el
papel de mi bloc de esbozos. Propuesta
de portada A
Como pienso mejor se define esta novela, que TRISKEL EDICIONES, S.C., ha tenido la temeraria amabilidad de publicarme, es decir que, a la narración icónica del cyberpunk NEUROMANTE (preferiría, personalmente, HARDWIRED), le han empotrado el western crepuscular GRUPO SALVAJE. El resultado: este trepidante hardboiled tribalpunk donde las cosas empeoran cada día y sin aparente remedio.

Soguetto es distopía de un futuro (no tan lejano) que confío jamás llegue, como precuela de RECALIBRADOS. Y se diferencia de relatos de pelaje similar en que su contenido político es mucho más fuerte, llamativo. Explico: en las narraciones “al uso” cyberpunk (desearía, sin embargo, Soguetto no se encuadre entre ellas; ‘cyberpunk’ es un término que estoy empleando para “familiarizaros”), el elemento dominante es el Corporativismo medio esbozado en ROLLEBALL (la buena, la de JEWISON) en lucha continua por obtener un producto, por lo común relacionado con las computadoras, y donde los gobiernos no tienen apenas trascendencia.

Nos encaminamos a eso, ¿no? Mas en Soguetto el enemigo es una fuerza política y un gobierno asiático concreto, que está devorando el poder Occidental al amparo de una marea populista ofuscada que descubre, en algunos casos, qué grave error ha supuesto entregar irreflexivamente su voto al Socialismo Pragmático Internacional. Soguetto relata una suerte de Segunda Guerra Fría, con bloques antagónicos bien definidos.

Estos caballeros han tenido la amable temeridad
de publicarme; espero que por laaasrgo tiempo
El asunto del populismo y sus peligros, reales o imaginarios… Forma parte de nuestra viva actualidad. Incluirlo me pareció importante, pues el entramado contra el cual nuestro genio adolescente y sufrido protagonista, GABRIEL T, se enfrenta, necesitaba un marco coherente, de sustancia creíble, con el cual el lector ‘interrelacionara’, haciendo, por tanto, más significativa la narración.

Lo siguiente es la degradación de las condiciones de vida y el presuntuoso análisis que efectúo sobre cómo la gente prefiere eso a plantar cara por obtener el gobierno del pueblo, para el pueblo, y por el pueblo, justo y próspero, que prometen saldrá del reto de las urnas. Y, a continuación, la parafernalia mecánica y de computadoras inevitables en este tipo de romances.

Pero enfoqué más Soguetto como un western (futurista) que como el enésimo cyberpunk. Debes destacar de la masa. Nos incitan aun en los anuncios de TV. De ahí la referencia a Grupo Salvaje, película llena de desperados desesperados que acaban mal, intentando empero romper su imagen de fracasados crónicos inmolándose en un espectacular tiroteo final. Gabriel T comparte esa suerte, mientras su oponente, STEFAN ROSLOV, su enemigo, otro genio adolescente pero “de Probeta” (obtenido mediante ingenética con el cruce muy selecto de genes adecuados), lo tiene todo.

Otra portada propuesta; digamos la B
El poder le abriga/avala; su palabra, es ley; desafía las reglas de su estricta raza cuando descubre que tiene un rival y le supera. Y ese conocimiento, en sus perfumadas y regaladas condiciones, en la molicie de ¡alabanzas! que ha recibido siempre, le trastorna. Desarrolla hostilidad insensata, aferrándose al lema de LOS INMORTALES: sólo puede quedar uno. Él.

Por si esto fuese poco, ‘invité’ a los HERMANOS FORSON a formar parte del drama. Para mis lectores, su simple mención ya sabe qué supone. Están a la altura; LIANA, aun más excesiva todavía en ciertos momentos. Y atentos a HEATHER ST. CLAIRE.

El gancho final lo reservo para mi poderosa, imaginativa y provocadora prosa. Soguetto dispara sus párrafos como puñetazos; su trama absorbe, obliga a querer saber qué ocurrirá ahora. Y todo, realzado por el hábil perfil psicológico de sus personajes. Aunque no dificulte al resto de lectores, los amantes del cine y el tebeo encontrarán abundantes referencias que harán su deleite. Les proporcionará un cómodo/estable entorno donde seguir leyéndome.

Como apunte final, reconocer que nunca concebí Soguetto cuan una especie de HARRY POTTER luchado con computadoras. Hay peligro. Canibalismo. Amor, en difíciles condiciones. Y muerte, al final. Como en la vida misma.