domingo, 16 de julio de 2017

MAD MAX FURY ROAD — UNA ÚLTIMA CONCLUSIÓN

Uno más de los afiches de esta cinta
Aunque me desconcertó que Mad Max no fuese el motor principal del heroísmo de su “nueva entrega”, que otros personajes hasta tuviesen una más decisiva participación en la trama, que parece esto el sigul de que el héroe solar quasitodopoderoso, solitario e individualista ejemplar, está acabado, sumergido en una masa de cooperantes con cuotas más/menos de protagonismo, luego empero pensé Pensé PENSÉ… que este Mad Max no es MEL GIBSON.
Y todos sabemos quién es Mad Max: Mel Gibson. ¿Me explico? Faltando el actor que le hizo pilar de la CultuPop, donde hubo esa retroalimentación (Gibson saltó a la fama gracias a ROCKATANSKY), ¿podía ser realmente una película de Mad Max? No. Extrañaríamos todas sus señas de identidad. Su hosco carácter de hombre amargado vagabundo del páramo. TOM HARDY… bueno, hace cuanto puede.

Pero no es Mad Max. Por eso, el personaje está tan diluido. Mezclado. No es Gibson. El auténtico Mad Max. Y creo ahora que GEORGE MILLER ha sido honesto. Faltando el sujeto clave/reconocible, no podía seguir produciendo como antaño. Nos ha dado un sucedáneo tapado por la energía de EMPERATRIZ FURIOSA. Habrá que acostumbrarse.